La Federación Americana del Trabajo y el Congreso de Organizaciones Industriales (AFL-CIO) trabaja incansablemente para mejorar la vida de los trabajadores.

Somos la federación democrática y voluntaria de 56 sindicatos nacionales e internacionales que representan a 12,5 millones de trabajadores y trabajadoras.

Nos esforzamos por garantizar que todos los trabajadores reciban un trato justo, con salarios y beneficios decentes, empleos seguros, dignidad e igualdad de oportunidades. Ayudamos a las personas a adquirir habilidades valiosas y preparación para el trabajo para la economía del siglo XXI. De hecho, operamos la red de entrenamiento más grande fuera de las fuerzas armadas de los Estados Unidos.

Nuestro trabajo se basa en asegurarnos de que todas las personas que trabajan para ganarse la vida tengan salarios y beneficios que apoyen a la familia y la capacidad de jubilarse con dignidad. Promovemos legislación para crear buenos empleos invirtiendo dólares de impuestos en escuelas, carreteras, puentes, puertos y aeropuertos, y mejorando las vidas de los trabajadores a través de la educación, la capacitación laboral y un salario mínimo habitable. Abogamos por fortalecer el Seguro Social y las pensiones privadas, garantizar políticas fiscales justas y hacer que la atención médica asequible y de alta calidad esté disponible para todos.

Luchamos por mantener buenos empleos en casa mediante la reforma de las reglas comerciales, la reindustrialización de la economía de los Estados Unidos y la protección de los trabajadores en la economía global. Nos mantenemos firmes para responsabilizar a las corporaciones por sus acciones.

Ayudamos a crear lugares de trabajo seguros y equitativos y damos a los trabajadores una voz colectiva para abordar las injusticias en el lugar de trabajo sin temor a represalias. Luchamos por la justicia social y económica y luchamos por vencer la opresión en todas sus formas.