Por Matthew Stock
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Muchos dueños de perros creen que sus mascotas son capaces de captar su estado de ánimo, pero los científicos han demostrado de una vez por todas que el mejor amigo del hombre puede reconocer las emociones en los humanos.
Los investigadores encontraron que al combinar información de diferentes sentidos, los perros forman representaciones mentales abstractas de estados emocionales positivos y negativos en las personas.
Estudios anteriores han demostrado que los perros pueden diferenciar entre las emociones humanas de signos como las expresiones faciales. Pero esto no es lo mismo que el reconocimiento emocional, según el Dr. Kun Guo, de la Escuela de Psicología de la Universidad de Lincoln.
«Este es el primer experimento empírico que mostrará que los perros pueden integrar entradas visuales y oratorias para comprender o diferenciar la emoción humana como la emoción del perro», dijo Kun a Reuters.
Los experimentos fueron llevados a cabo por un equipo de expertos en comportamiento animal y psicólogos de la Universidad de Lincoln, Reino Unido, y la Universidad de Sao Paulo, Brasil.
Presentaron 17 perros domésticos sin entrenamiento con imágenes y sonidos que transmiten expresiones emocionales positivas o negativas en humanos y perros.
Los perros utilizados en la prueba no estaban familiarizados con el procedimiento, evitando cualquier posibilidad de acondicionamiento. El sonido de vocalización que acompañaba a los rostros humanos también era desconocido.
» Usamos el portugués para perros británicos, por lo que no estaban habituados con ninguna palabra, no estaban familiarizados con ninguna palabra. Por lo tanto, queríamos ver si los perros podían evaluar el contenido emocional de las voces humanas y si realmente discriminarían la información emocional dentro de ellos», explicó Natalia De Souza Albuquerque, estudiante de doctorado en psicología experimental.
Los resultados, publicados recientemente en la revista Biology Letters de la Royal Society, encontraron que los perros pasaron mucho más tiempo observando las expresiones faciales que coincidían con el estado emocional de la vocalización, tanto para sujetos humanos como caninos.
» Lo que descubrimos es que cuando los perros escuchaban sonidos positivos, miraban más a caras positivas, tanto humanas como de perros. Y cuando escuchaban sonidos negativos, miraban más a caras negativas y enojadas», agregó De Souza Albuquerque.
El estudio muestra que los perros pueden integrar dos fuentes diferentes de información sensorial en una percepción de emoción tanto en humanos como en perros. Esto significa que los perros deben tener un sistema de categorización interna de los estados emocionales. Entre los grupos de animales, es una habilidad cognitiva que antes solo se evidenciaba en primates.
Los investigadores creen que la capacidad de combinar señales emocionales puede ser inherente a los perros. Como especie altamente social, la detección de emociones en los seres humanos les habría ayudado en su domesticación por parte de las personas a lo largo de las generaciones.