Los huesos de la columna vertebral (vértebras) están apoyados por discos que amortiguan las vértebras. Los discos tienen un exterior resistente (anillo fibroso) y un centro suave y gelatinoso (núcleo pulposo) que absorbe el impacto de nuestros movimientos. Los desgarros anulares pueden ser causados por el exceso de tensión en un disco, que puede ser el resultado de movimientos diarios repetitivos o algún trauma. El dolor del desgarro anular y otros síntomas varían según su ubicación a lo largo de la columna vertebral y la gravedad del desgarro.
Los desgarros anulares se clasifican de la siguiente manera:
- Desgarros radiales – Estos son los más comunes y a menudo causados por los cambios degenerativos que ocurren a medida que envejecemos. Un desgarro radial comienza en el centro del disco y se extiende hasta la capa externa del anillo fibroso. Estos desgarros tienden a provocar hernias discales.
- Desgarros periféricos: La lesión traumática es la causa más común de este tipo de desgarro anular, que afecta a las fibras externas del fibroso anular. Los espolones óseos son otra causa común de desgarros periféricos. Estos tipos de desgarros pueden hacer que el disco se deteriore.
- Desgarros concéntricos: Con este tipo de desgarro anular, las capas del fibroso anular se separan parcial o completamente.
El dolor del desgarro anular puede ser intenso, según el tipo de desgarro y el daño en el disco, y puede contribuir a otras afecciones dolorosas de la columna vertebral.
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Causas y factores de riesgo del desgarro anular
La columna vertebral soporta la mayor parte de su peso, por lo que no es sorprendente que, a medida que envejecemos, el desgaste diario comience a pasar factura. A medida que envejecemos, nuestros discos pierden agua y se vuelven frágiles y menos flexibles, lo que los hace más propensos a las lágrimas. Junto con el envejecimiento, otras cosas que se pueden considerar causas de desgarro anular incluyen:
- Ocupaciones y actividades con movimientos repetitivos, como levantar o torcer
- Levantar objetos incorrectos
- Estar sentado durante períodos prolongados, como estar sobre una computadora todo el día
- Llevar un exceso de peso corporal
- Lesiones traumáticas, como un accidente automovilístico o una lesión por deporte de contacto
Síntomas de desgarros anulares
Los síntomas de desgarros anulares a menudo se confunden con una simple distensión de espalda o un tirón muscular. El dolor del desgarro anular empeora cuando hay contacto con un nervio cercano debido a una hernia de disco. Esto puede causar los siguientes síntomas:
- Dolor de espalda que se irradia hacia las nalgas o las piernas
- Dolor de cuello que se irradia hacia los hombros o los brazos
- Entumecimiento y debilidad en la espalda, las nalgas, la ingle o las piernas
- Entumecimiento y debilidad en el cuello, los hombros o los brazos
- Flexibilidad limitada
Otros síntomas de desgarro anular pueden incluir hormigueo y sensación de «pinchazos y agujas» y espasmos musculares. El dolor del desgarro anular a menudo empeora cuando está sentado o al hacer esfuerzo, como cuando tosa o estornuda, o cuando se agacha o levanta.
Opciones de tratamiento del desgarro anular
El tratamiento del desgarro anular depende de la gravedad de su afección. Siempre se recomienda usar una combinación de opciones de tratamiento conservador no quirúrgico primero. Consulte a su médico para averiguar lo que es adecuado para su caso específico. Las opciones de tratamiento no invasivo para el desgarro anular incluyen:
- Medicamentos de venta libre: los analgésicos de venta libre, como el ibuprofeno o el paracetamol, pueden aliviar el dolor y la inflamación de leves a moderados.
- Calor y frío-Aplicar calor o frío puede ayudar con el dolor y la inflamación.
- Medicamentos recetados para el dolor: se pueden recetar medicamentos para el dolor más fuertes, como narcóticos, para el dolor intenso. No se recomiendan para uso a largo plazo debido a sus efectos secundarios y tendencia a crear hábito. Tenga en cuenta que Back Pain Centers of America no está involucrado en la prescripción de narcóticos.
- Relajantes musculares: el médico puede recetarte un relajante muscular si tienes espasmos musculares.
- Masaje: El masaje puede ayudar a aliviar el dolor y la rigidez de los músculos.
- Inyecciones de esteroides: los corticosteroides inyectados directamente en la parte afectada de la columna vertebral se pueden usar para aliviar temporalmente el dolor moderado a intenso. Se puede combinar un anestésico (agente anestésico) para aliviar el dolor de forma adicional.
- Fisioterapia y ejercicio: los ejercicios para aliviar la presión sobre la columna vertebral pueden ayudar con el dolor y mejorar la flexibilidad y el rango de movimiento. Aprender una postura adecuada y técnicas de levantamiento de pesas más seguras también puede ayudarlo a evitar una ruptura de disco y otros problemas de espalda más adelante.
- Estimulación nerviosa eléctrica transcutánea (TENS): Este tipo de terapia utiliza corrientes eléctricas de bajo voltaje para estimular los nervios y aliviar el dolor.
Si una serie de tratamientos conservadores no alivian el dolor del desgarro anular, es posible que el médico recomiende una cirugía. Las opciones de tratamiento de desgarro anular mínimamente invasivo se pueden usar para descomprimir el nervio que está causando los síntomas. Estos procedimientos ambulatorios a menudo proporcionan alivio inmediato una vez que se libera el nervio comprimido. El tiempo de recuperación con el tratamiento de desgarro anular mínimamente invasivo es considerablemente más corto que con la cirugía abierta tradicional.
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