la Mayoría de nosotros recordar la sensación de un ser querido, un abrazo en un momento de necesidad. El calor de sus brazos alrededor de nuestros cuerpos proporciona una sensación de seguridad, a veces incomparable a cualquier otra cosa. Los abrazos son actos de bondad que recorren un largo camino. El 21 de enero de 2020, celebramos el Día Nacional de los Abrazos no como un día festivo, sino como un recordatorio de la importancia del altruismo. El reverendo Kevin Zaborney fundó el Día Nacional del Abrazo el 29 de marzo de 1986 en Caro, Michigan, para fomentar la demostración de emoción hacia otros seres humanos.
Por un momento, recuerda el abrazo de tu madre, padre, amante, hermana, hijo o amigo durante un momento en el que sentías dolor físico o emocional. ¿Encontraste alivio en sus brazos? ¿Es posible que el calor del abrazo te hiciera sentir que las cosas estarían bien? La seguridad de un abrazo puede traer más beneficios a un ser humano de lo que se cree. Sin lugar a dudas, es un consuelo inexplicable que te sacude hasta la médula debido a su poder curativo. Las investigaciones han demostrado que los abrazos tienen la capacidad de ayudar a liberar el estrés, mejorar la confianza en sí mismo, aumentar la inmunidad, reducir la depresión y promover la confianza. Sobre todo, los abrazos son necesarios para una supervivencia próspera. Los seres humanos pueden mejorar el bienestar y la salud incorporando el tacto en las relaciones. La condición de «Retraso en el desarrollo» es prueba de que la deficiencia del tacto humano puede paralizar el desarrollo. Los bebés que carecen de contacto físico demuestran una capacidad limitada para funcionar con éxito. Los niños no tienen un crecimiento normal debido a la ausencia de contacto con la piel. La buena noticia es que el trastorno se puede mejorar con abrazos y toques regulares.
Las ventajas de abrazar no se detienen ahí, como informó recientemente la Academia Nacional de Ciencias de los Estados Unidos en un interesante hallazgo. Una resonancia magnética mostró que participar en comportamientos altruistas disminuye el dolor. Los investigadores crearon varias experiencias de la vida real para probar cómo hacer cosas buenas para otros aumenta desinteresadamente el umbral del dolor. El resultado proporcionó evidencia de una conexión real entre bondad y bienestar.
Personalmente, uno de los abrazos más poderosos que he recibido en un momento de necesidad fue de un amigo. El día que se dio la noticia de que mi trabajo sería eliminado, perdí la voz. No había palabras que pudieran expresar mi desesperanza en ese momento. Una querida novia me conoció en las puertas de salida del edificio. No intercambiamos palabras, su abrazo lo dijo todo mientras me ahogaba con lágrimas de desesperación. Era exactamente lo que necesitaba en ese segundo, lo suficiente para mantenerme unida hasta que llegué a casa para liberar las emociones que estaban esperando para salir de mi pecho.
el 21 De enero, vamos a desafiarnos a nosotros mismos para abrazar a alguien que puede tomar consuelo en el acto. Es posible que se sienta deprimido, desesperado, asustado o solo, y al extender un abrazo, palabras de aliento o mostrar compasión, podemos ayudar a que la vida de otra persona sea más brillante.