Es difícil ser un niño. Estás viviendo en casa bajo el pulgar de tus padres. No tienes dinero, ni educación, ni autonomía real. Ni siquiera puedes ver ciertas películas sin un adulto contigo. Entonces, cuando se trata de la ley, ¿qué derechos tiene el niño o adolescente promedio? Si crees que la respuesta es «ninguna», prepárate para pensar de nuevo.

Bajo la ley, los niños en los Estados Unidos son seres humanos plenamente formados con los mismos derechos constitucionales básicos de los que disfrutan los adultos. Al igual que cualquier otro ciudadano, los niños tienen derecho al debido proceso legal y el derecho a un abogado. También están protegidos contra castigos crueles e inusuales y registros e incautaciones irrazonables. Sin embargo, la ley también reconoce que los niños no son lo suficientemente maduros física y emocionalmente para manejar la responsabilidad asociada a actividades legales como beber, y mucho menos el derecho a votar o postularse para un cargo público. La ley concilia estas dos ideas al implementar la mayoría de edad diseñada para definir cuándo una persona tiene la capacidad de ejercer sus derechos de manera responsable. Por lo general, varían según el estado, pero rigen todo, desde el derecho a conducir hasta el derecho a casarse.

Hay algunas excepciones, sin embargo. En el sistema de justicia de menores, por ejemplo, los niños no reciben fianza ni son juzgados por jurados de sus pares. Los menores tienen derecho a buscar un abogado, si hay una posibilidad de que puedan ser juzgados como adultos, así como el derecho a una audiencia ante un juez. Los niños también pueden solicitar la emancipación legal de sus padres, pero enfrentarían una batalla cuesta arriba allí: La Cláusula de Libertad de la Enmienda 14 da a los padres el derecho de criar a sus propios hijos, siempre y cuando no haya abuso o negligencia.

Hay otra excepción que los niños y adolescentes tienen más probabilidades de encontrar. Aprende todo sobre esto en la siguiente página.