Aunque a menudo estamos muy enfocados en nuestra salud física, cuidar nuestra salud emocional es igual de importante. Si has descuidado tu salud emocional, no hay necesidad de preocuparse. En este artículo, compartiremos 6 formas en que puedes nutrirlo para una vida más saludable y feliz.
En primer lugar, ¿qué es la salud emocional?
Comprender la salud emocional es clave para aprender a nutrirla. La salud emocional se trata de cómo pensamos, sentimos y nos comportamos. Las personas que están emocionalmente sanas generalmente pueden monitorear y ajustar sus pensamientos, sentimientos y comportamientos. Sin embargo, estar emocionalmente saludable no significa que estés feliz todo el tiempo. Se trata de ser consciente de tus emociones y aprender a manejarlas, ya sean positivas o negativas.
¿Por qué es importante cuidar de su salud emocional?
La investigación muestra que si su salud emocional sufre, también lo hará su salud física. Las personas con buena salud emocional son capaces de encontrar un equilibrio en su vida entre el ocio, la actividad y el trabajo. Nuestra salud y bienestar emocional es un aspecto a menudo pasado por alto pero muy importante de nuestra salud general. Según la Asociación Americana de Psicología, cuando las personas son felices, es más probable que trabajen para lograr sus objetivos. Además, tienden a conectarse con otras personas que tienen energía y optimismo similares. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de los Estados Unidos, los niveles más altos de bienestar están relacionados con un menor riesgo de enfermedad, enfermedad y lesiones, recuperaciones más rápidas, un sistema inmunológico que funciona mejor, una vida más larga y una mayor productividad en el trabajo.
Cómo incorporar la atención preventiva en su rutina diaria
Todos los días incorporamos la atención preventiva en nuestra rutina para mejorar nuestra salud física. Tratamos de dormir lo suficiente, comer comidas saludables y tomar las medidas necesarias para garantizar que nuestros cuerpos se mantengan físicamente en forma. Pero nos olvidamos de aplicar estos mismos métodos cuando se trata de cuidar nuestra salud emocional. Ser consciente de tus emociones y reacciones, y tratar de entenderlas, es una pieza importante.
Una forma de hacer esto es creando un hábito diario de rastrear tus pensamientos. Por ejemplo, puede crear una lista y comenzar a categorizar las causas de la tristeza, la frustración, la ira u otras emociones en su vida. Hacer esto puede ayudarlo a comprender y manejar los pensamientos que surgen a lo largo del día. También puede facilitar un poco este proceso al anclar esta nueva práctica con un viejo hábito, como rastrear mentalmente sus pensamientos mientras cocina la cena o en su carrera diaria.
Ahora veamos 6 maneras de nutrir tu salud emocional
1. Conecta con tu red de apoyo
Los estudios muestran que tener una fuerte conexión social, repartiendo tiempo para conectarte con personas positivas y amorosas que te importan, puede proporcionar una vida mucho más significativa. Si no tienes una red social sólida, hay varias maneras de hacer nuevos amigos. Puedes ser voluntario en una organización benéfica local, unirte a una clase que encuentres interesante o incluso pasar más tiempo con un compañero de trabajo o vecino que solo conozcas un poco. Si tienes dificultades para hacer nuevos amigos, puedes trabajar con un entrenador de salud emocional para aprender a fortalecerte y superar este miedo. A algunas personas les va mejor con un grupo de apoyo grande, mientras que otras necesitan un sistema de apoyo pequeño. Puedes probar ambas formas para averiguar cuál funciona mejor para ti.
2. Aprenda cómo lidiar con el estrés
Cuando está estresado, su cuerpo produce ciertas hormonas para ayudarlo a sobrellevarlo. Pero cuando se producen demasiadas de estas hormonas durante un largo período de tiempo, las hormonas pueden desgastar el cuerpo y la mente. Determina la causa raíz de tu estrés y trata de eliminarlo. Si hay un cierto ambiente que te causa estrés, considera dejar este espacio por un tiempo. Si es su trabajo, considere un cambio de carrera o tomar una licencia prolongada. O bien, puedes intentar cambios más pequeños, como incorporar respiración profunda, meditación y ejercicio para ayudarte a sobrellevar el estrés.
3. Cuide su cuerpo
Nuestro bienestar físico y emocional está conectado y uno afecta al otro. Comer sano, dormir lo suficiente y hacer ejercicio son tan importantes para nuestra salud física como para nuestra salud emocional. Por ejemplo, al evitar o reemplazar la comida chatarra con opciones más saludables, como frutas y verduras frescas, le das a tu cerebro el combustible que necesita para mantenerse saludable y alerta. Los alimentos de alta calidad, cargados de vitaminas y minerales esenciales, ayudan a nutrir el cerebro y a crear hormonas asociadas con una buena salud emocional. Si bien los alimentos procesados y refinados dificultan que su cuerpo produzca insulina, combaten la inflamación y, en general, pueden tener un impacto negativo en cómo se siente.
4. Pasar tiempo de calidad consigo mismo
A algunas personas les resulta difícil pasar tiempo de calidad consigo mismas, pero hacerlo es importante para el bienestar emocional. Amy Morin, trabajadora social clínica con licencia y psicoterapeuta, recomienda pasar más tiempo contigo mismo porque » se ha relacionado con una mayor felicidad, una mayor satisfacción con la vida y un mejor manejo del estrés.»Puedes empezar por dedicarte a tus pasatiempos favoritos o incluso adquirir uno nuevo. Llevar un diario también puede ayudar. Escribir tus pensamientos y emociones puede hacer que sea más fácil manejarlos. Si no eres fan de la escritura, comienza cada día hablando contigo mismo. A veces, hacer esto generalmente resulta en un diálogo interno negativo al principio. Nos encontramos haciendo declaraciones como » ¡No puedo hacerlo!»o» ¡Nunca podré pasar por esto!»Cuando esto suceda, no trates de bloquear esa línea de pensamiento en particular. En su lugar, tómese un momento para contrarrestar intencionalmente cada pensamiento negativo con verdades positivas en su vida. Este simple ejercicio te ayuda a descubrir la esperanza oculta y la alegría en cualquier situación dada.
5. Obtenga ayuda cuando la necesite
Si está buscando apoyo adicional cuando se trata de controlar el estrés, aumentar su confianza o encontrar un sentido de propósito, puede ser el momento de conectarse con alguien y obtener ayuda. Trabajar con un entrenador de salud emocional o un terapeuta con licencia podría ser el siguiente paso necesario y que cambiaría la vida.
Además, todos los planes de seguro de salud bajo la Ley de Cuidado de Salud a Bajo Precio están obligados a ofrecer «beneficios esenciales de salud» que incluyen ver a un terapeuta, psicólogo o psiquiatra. Esta persona puede ayudarte a crear un plan detallado en torno al tema con el que estás luchando, establecer objetivos viables y, en última instancia, ayudarte a mejorar tu bienestar emocional.
6. Crea un equilibrio entre el trabajo, el descanso y el juego
La vida se basa en el equilibrio. Crear un equilibrio entre el trabajo y la vida es muy importante para su bienestar emocional. Es necesario crear tiempo para recargar energías, pasar tiempo con la familia, hacer ejercicio y cuidarte a ti mismo para que puedas ir al trabajo sintiéndote con energía y motivado. Ir de vacaciones, evitar las llamadas de trabajo mientras está en casa y dormir lo suficiente todas las noches son algunos buenos ejemplos para ayudarlo a mantener un buen equilibrio entre el trabajo y la vida personal.
Su salud emocional afecta todos los aspectos de su vida diaria. Por lo tanto, si el cuidado de su salud emocional ha sido un aspecto pasado por alto de su atención médica general, es hora de hacer un cambio. Aplicar estos 6 consejos a tu vida diaria es una excelente manera de comenzar.